Mis noches a su lado....

Y aquí estoy... un viernes por la noche, echada en mi cama viendo una serie en Netflix, mientras Gianna duerme plácidamente a mi costado...

Hace una hora masomenos, bajé al primer piso donde están los primos de mi esposo reunidos, pude saludarlos, sentarme y conversar por 5 minutos mientras Gianfranco se quedó con la bebé... sólo 5 minutos... tiempo suficiente para que la chinita sienta que no estoy a su lado y empiece con sus famosos llantos, los que no paran hasta que esté a su lado nuevamente o hasta que la despierten del todo y la distraigan.

No es la primera vez que pasa esto, desde hace un par de meses o un poco más, la bebé se despierta en las noches y si no me ve (así esté tomando agua) llora y llora...y yo aparezco de donde sea y como sea para calmarla y hacerla dormir de nuevo.

Así son mis noches desde entonces, la cambio, jugamos, le da sueño, toma teta y se duerme y yo no me muevo de su lado o del cuarto hasta el día siguiente.

Si, extraño salir de noche, poder bajar y compartir con las visitas o no sé demorarme más de 5 minutos en otro lado que no sea mi cuarto... Son sentimientos encontrados, porque no quiero que llore así, pero al mismo tiempo pido un poco de aire en las noches...

Gianna es una bebé de alta demanda (ya les contaré un poco más sobre eso) y esto hace que sea más intensa y absorbente que el resto de bebes... Gianfranco y yo (y el resto de mi familia) hemos aprendido a llevar esta situación, teniendo mucha paciencia para calmarla, atenderla y reconfortarla , aceptando que cada bebé es diferente y tiene su propio ritmo...sin presiones, sin comparaciones... Ya llegará el día en que no despierte de noche o que no se de ni cuenta que no estoy...como dejó de dormir en brazos, como aceptó tomar biberón un tiempo, como acepta no verme por unas horas en el día...

La verdad es que no sé si estoy haciendo bien o no, sólo sé que odio escucharla llorar así y que solo quiero ir donde esté a calmarla y darle tranquilidad...

Empecé este post sintiendome bastante preocupada y angustiada por no saber hasta cuándo estaremos en esta situación o si es que estoy sobreprotegiendola, pero poder escribir y desahogarme me ayuda a darme cuenta una vez más, que el tiempo vuela, que ella crecerá demasiado rápido y que todo esto será parte de un recuerdo...

Darme cuenta que ahora debo aprovechar cada segundo a su lado, ayudarla a seguir descubriendo este mundo y acompañarla haciéndole las cosas un poquito más fácil.

Todo con amor, paciencia, comprensión y respeto...